Comunicado
Muy estimados hermanos presbíteros de la Arquidiócesis de Monterrey:
Que la gracia del Padre celestial, el amor entrañable de Jesucristo, su Hijo y la fuerza del Espíritu Santo, habiten en cada corazón y hagan muy fructífero el ministerio de amor a ustedes encomendado.
Para dar continuidad a lo que iniciamos como Presbiterios de la Provincia de Monterrey, buscando la comunión entre los diferentes presbiterios, el conocimiento de nuestros Obispos de la Provincia y escuchar su palabra como pastores de las comunidades de esta región del país, este próximo 22 de Julio tendremos la segunda Reunión con los obispos y presbíteros de esta Provincia.
La ocasión anterior, en la fiesta de Jesucristo, Sumo y Eterno Sacerdote, resultó sumamente agradable volver a ver a excompañeros de los diferentes seminarios, después de tantos años. Además, escuchar a todos los Obispos, con sus diferentes mensajes y experiencias. Junto a todo esto, ayudó mucho a conocer cómo nos encontramos no sólo en la diócesis o en la parroquia, sino también a nivel personal, la creación de grupos o mesas de reflexión.
Por tal motivo, los responsables de la Comisión del Clero de cada diócesis de esta Provincia de Monterrey convocamos a una nueva reunión para escuchar la voz de los obispos eméritos, quienes estuvieron al frente de una de las diócesis de esta Provincia.
El día de esta reunión será este 22 de julio, de 10:00 a.m. a 11:30 a.m. Esperamos contar con tu presencia.
El trabajo que se propone es que cada Obispo emérito tenga una participación de 15, máximo 20 minutos, donde estemos todos reunidos. Después se harán grupos aleatorios, donde los Obispos expositores dirigirán la dinámica para compartir e intercambiar experiencias.
Anexamos el link para la reunión: https://us02web.zoom.us/j/81942880926
Este link estará abierto desde las 9:30am. A partir de esa hora tendremos los micrófonos abiertos por si gustas saludar a los hermanos en el ministerio con los que conviviste en el Seminario y ya tienes algunos años de no ver o saludar.
Sin más por el momento, me despido deseándote toda clase de bendiciones en el Señor.
Servidor en Cristo Jesús,