Marawi, Filipinas (www.pastoralsiglo21.org) 26 de marzo del 2018.- A un año de que hombres extremistas inspirados por el Estado Islámico hicieran estallar la guerra, en esta ciudad no se celebrarán los oficios de Semana Santa.
El obispo Mons. Edwin Dela Pena dijo que esta será la primera vez que la Semana Santa no se celebrará en esta ciudad, que es predominantemente musulmana, y en la que más de 300 mil personas permanecen en albergues temporales.
La Catedral, que fue demolida y quemada al cumplirse cinco meses del conflicto, permanece cerrada.
Aseguró que otras parroquias que no han sido afectadas, seguirán en funcionamiento.
Incluso el vicario general de la prelatura, el pbro. Teresito Soganub, no regresará a Marawi por lo pronto, pues está en un periodo de recuperación, luego de haber sido secuestrado cuatro meses por los terroristas.
La gente ha ofrecido ayuda para reconstruir la Catedral, pero el obispo ha dicho que su “prioridad no es la reconstrucción, sino las necesidades de la comunidad”.
La semana pasada, el organismo pontificio Ayuda a la Iglesia Necesitada inició una campaña de fondos para ayudar a reconstruir Marawi y crear conciencia de la realidad y los horrores de la guerra. RD