Misa de fiesta patronal del Rosario en Guadalupe
7 de octubre de 2018
Estimadas hermanas y hermanos, fieles de esta comunidad que con alegría festejamos a nuestra patrona y 15 años de la parroquia.
Quiero agradecer a los padres misioneros del Espíritu Santo, a los padres diocesanos, gracias por estar en este festejo muy significativo.
Hoy la Palabra de Dios nos tiene muchos reflexiones, a valorar en el matrimonio y su familia
El matrimonio y la familia no son una ocurrencia humana, es parte del proyecto de Dios.
Por eso hoy quiero animar a los esposos, las familiar, para que se sigan amando
Pero tratando de aplicar la Palabra de Dios a este acontecimiento parroquial, lo primero, hemos aprendido que la parroquia como comunidad es una familia y cada familia es una iglesia doméstica
Entre la parroquia y la familia hay un intercambio. Porqué Dios instituyó el matrimonio y la familia, muy sencillo, porque no quería que estuviera solo el hombre.
Cómo vio el Señor a Adán, seguramente triste, Dios creo los animales pero estos no alcanzaron a ser la ayuda que necesitaba Adán.
Ningún animalito puede sustituir a un ser humano, no nos basta tener una mascota, si bien dicen algunos que hace mucho bien tener una mascota, no alcanza a llenar la humanidad.
Los seres humanos no somos perfectos, cometemos muchos errores pero tenemos también muchos aciertos.
Cuántos matrimonios se aman, mientras otros se separan, hay también familias incompletas, esa es la realidad humana.
En otras ocasiones por la enfermedad y la muerte pero Dios instituyó la iglesia, la iglesia es nuestra madre que viene en nuestro auxilio para superar la soledad.
El Señor viene en nuestra ayuda y de ahí la gran responsabilidad de hacer que los demás se sientan felices y apoyados. Tenemos que cuidar este don de Dios, ser una familia, nos dijo el autor de los hebreos “a Cristo no le dio vergüenza llamarnos hermanos”
A un hermano se le quiere porque un hermano es un regalo de Dios , los amigos se escogen pero los hermanos son un regalo de Dios y eso lo hace más grande.
El Señor les concedió hace 15 años ser una familia, busquen que nadie se sienta solo, que todos reciban el afecto y apoyo de la sociedad, somos una familia que se vive de manera concreta en la parroquia.
De qué vive una parroquia, de la Palabra de Dios, de los sacramentos (de modo especial la Eucaristía) y tercero en una parroquia se ama y se ayuda al más necesitado.
Hay tres misiones: en la pastoral profética, la litúrgica y la social, que esta parroquia sea una buena familia, cada uno construya con su vida la fraternidad de esta comunidad.
Todos nos hacemos falta porque Dios sabe que nos necesitamos.
Dios bendiga esta comunidad y quiero decirles que el Papa Francisco nos ha pedido que el mes de octubre recemos el santo rosario, que pidamos su amparo y encomendemos a la iglesia al Arcangel San Miguel.