𝟔𝟎 𝐀𝐧𝐢𝐯𝐞𝐫𝐬𝐚𝐫𝐢𝐨 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐂𝐨𝐫𝐨𝐧𝐚𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐏𝐨𝐧𝐭𝐢𝐟𝐢𝐜𝐢𝐚 𝐲 𝐍𝐮𝐞𝐯𝐚 𝐂𝐨𝐫𝐨𝐧𝐚 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐕𝐢𝐫𝐠𝐞𝐧 𝐝𝐞𝐥 𝐑𝐨𝐛𝐥𝐞‧
Este pasado viernes 31 de mayo, se llevó a cabo la solemne Eucaristía, con motivo del 60 Aniversario de la Coronación de la Virgen del Roble, patrona de la Arquidiócesis de Monterrey.
Al inicio de la celebración, el Arzobispo de Monterrey, dio la bienvenida a todos los presentes, especialmente al representante del Papa en México, el Nuncio Apostólico Joseph Spitieri.
Además, Monseñor Rogelio Cabrera, compartió su agradecimiento a quien tuvo la iniciativa de la Coronación de la Patrona de Monterrey.
“Quiero agradecer a mi antecesor Monseñor Alfonso Espino y Silva, que haya tomado esta iniciativa de haberse presentado al Santo Padre San Pablo VI, para que la virgen del Roble fuera coronada con su autorización”.
Al referirse a la nueva corona para la Virgen del Roble apuntó:
“Se ha hecho lo mejor que se puede, pero hay un gesto para mí muy importante, que todas las comunidades parroquiales aportaron para presentar a la Virgen esta corona, cada Parroquia al menos aportó 1 gramo de oro, de esta manera hoy estamos felices de presentarle a la Virgen María este regalo”.
“Hoy le queremos ofrecer a la Santísima Virgen María y a mí me da mucho gusto, mucha satisfacción el poderle complacer a la Virgen con esta corona bien merecida, aunque vamos a decir sencilla, pero que brota del corazón”.
Por su parte, el Nuncio Apostólico Joseph Spitieri, realizó en la homilía, un llamado a la esperanza y fraternidad.
“Debemos mantener siempre en nuestro corazón el anhelo de un mundo mejor, más fraterno, más solidario, frente a tantas visiones trágicas a causa las guerras, a causa de la violencia, pero también a causa de ciertas ideologías que quieren imponer sobre nosotros y particularmente sobre nuestros jóvenes”.
“Ante esta visión trágica, sin esperanza, sin futuro de la vida, estamos llamados a ofrecer un rayo de esperanza, estamos llamados a ser siempre personas en relación con los demás, no encerrados en nosotros mismos, personas capaces de ofrecer esta protección de Virgen María, la Arca de la Nueva Alianza, los unos a los otros”.
La colocación de la nueva corona, se llevó antes de la conclusión de la celebración. Un momento muy emotivo donde el Arzobispo de Monterrey y el Nuncio Apostólico subieron las escalinatas, hasta llegar al altar de la Virgen y colocar sobre su cabeza la nueva ofrenda. Los sacerdotes, religiosos, religiosas y fieles laicos acompañaron el momento con un fuerte aplauso y cantos marianos.
Nos llenamos de Júbilo y alegría por este momento de fe y de gracia para la Iglesia de Monterrey.