En torno al relato del Evangelio del tercer domingo de Cuaresma, en el que se nos presenta a Jesús molesto por la falta de respeto al lugar sagrado, Monseñor Rogelio Cabrera, en su mensaje dominical en redes sociales, hizo un llamado a cuidar y valorar los templos.
“En este tiempo de conversión, quiero invitarles a que valoremos nuestros espacios sagrados, nuestros Templos, asistiendo y permaneciendo en ellos con la debida reverencia, en el silencio que nos ayuda a interiorizar”.
“Muchas veces olvidamos que este lugar está dedicado a la oración, a la celebración de nuestra fe. No es un espacio en donde podemos hacer lo que queramos, hay que aprender a guardar el respeto”, añadió.
“En muchos lugares, desafortunadamente, los Templos han dejado de ser espacios para el culto, y se han convertido en lugares concurridos por turistas en donde solo se aprecia el arte sacro y las bellas construcciones pero se han olvidado para qué fueron construidos”.
“No olvidemos que el Templo es un signo claro que nos lleva al encuentro con Dios y que nos debe recordar que nosotros mismos somos Templos del Espíritu Santo y que no debemos permitir que nuestro Templo sea maltratado”.
Finalmente, en este tema señaló: “Busquemos que los lugares sagrados sean realmente eso, un lugar en donde todos podamos encontrarnos con nuestro Padre Dios, viviendo la fe, poniendo en práctica las obras de misericordia, acompañando a los enfermos en el alma o en el cuerpo, siendo un lugar visible en donde el amor de Dios se haga vida para bien de todos”.