Este sábado 31 de agosto, se llevó a cabo en nuestra ciudad un Retiro Mariano, dirigido por Fray Stefano Cecchin O.F.M, Presidente de la Pontificia Academia Mariana Internacional, a quien tuvimos el gusto de entrevistar para Pastoral Siglo XXI.
¿Cuál es la Misión de la Pontificia Academia Mariana Internacional?
Nuestra academia tiene el papel de coordinar a todos los que aman a la Virgen María del mundo, principalmente católico, pero después tenemos protestantes Ortodoxos, también Musulmanes y de otras religiones donde la Virgen se apareció, como en la India, en Taiwán quienes quieren conocer más la imagen de María como mujer, Madre, y esto puede ser un punto de unión, de diálogo entre las culturas.
¿ Cuál ha sido la experiencia en Monterrey, principalmente en este retiro mariano?
Es la experiencia que hago siempre cuando vengo a México, normalmente cuando estoy en Italia, poco me siento cura, aquí me siento verdaderamente cura, porque la gente quiere conocer a Dios, quiere acercarse a Él y sobre todo quiere conocer nuestra fe cristiana por medio de María.
México tiene la bendición más grande de todo el mundo, la aparición de Guadalupe, donde abrió el camino que conduce a Cristo y por eso veo que aquí siempre estos caminos, que la gente está en su interior con el deseo de conocer a Dios, por eso me gusta mucho eso, que la gente siempre está muy interesada.
¿Cómo podemos vivir una auténtica devoción a la Virgen María?
La devoción pura está dentro cada persona, en el corazón cada uno, pero muchas veces el grande problema es el desconocimiento, no es la maldad, es el hecho que sí, nosotros somos devotos, rezamos a la Virgen, hacemos Rosarios, vamos a la fiesta, pero conocemos poco de ella.
En esta charla he compartido que la iglesia enseña que, para ser verdaderamente amante de la Virgen tú tienes que imitarla, pero para imitarla tienes que conocer su vida, conocer las virtudes de la Virgen y por eso nosotros necesitamos más formación y ese es el papel principal de la Academia Pontificia Mariana. El Papa Pablo VI, al término de la tercera parte del Concilio Vaticano II, cuando promulgó la constitución dogmática Lumen Gentium, donde está la parte de María dijo que, el conocimiento de la verdadera doctrina católica sobre María, será siempre la llave para comprender el misterio de Cristo y de la Iglesia, por eso es una necesidad y un deber conocer a María.
El Papa ha invitado a la Iglesia a vivir un proceso de sinodalidad, caminar juntos, ¿Qué papel ocupa la Virgen María en este proceso que la Iglesia vive actualmente?
Como he explicado, el santo Papa Pablo VI, dijo: “no podemos ser cristianos sino somos marianos”, esto significa comprender el papel fundamental de la Virgen, que es abrir el camino que conduce a Cristo, y por eso a mí me gusta mucho la espiritualidad del tener de la mano a la Virgen, la Virgen que tiene a cada uno de nosotros de la mano, para llevarnos a Cristo y nosotros católicos sabemos bien que el camino seguro para llegar a Cristo Jesús es María, no podemos hacer un camino de sinodal sin ella, sin la Madre, porque si no somos estériles, sin la Madre somos estériles, una iglesia sin María es una Iglesia estéril, que puede equivocarse sobre verdadero camino que conduce a Cristo, María es ella quien conduce y por eso necesitamos la presencia de María.
Nosotros estamos preparando el Congreso Mariano internacional en septiembre del año próximo del jubileo, hablando de María en la sinodalidad, una iglesia que tiene la actitud de María para ser sinodal.
¿Cuál sería la actitud recomendable para acercarse a María?
La fe es el principio fundamental, la humildad es también la actitud, el deseo de conocerla y de entrar en relación con María, ella es vidente, María está en el cielo en alma y cuerpo, es una vidente, por eso tengo que aprender de cómo hablar con ella, de cómo tener una relación con ella, de comer presentar a ella mi vida.
A ella Dios la liberó de la Cruz, para que ella pueda ser mi Madre, como la Virgen de Guadalupe con Juan Dieguito: ¿Por qué tienes miedo?, ¿No estoy aquí que soy tu Madre?, cuando hacemos esta experiencia que no estamos solos, y que Dios nos regaló a nosotros una Madre, que esta siempre para protegernos.
Finalmente, ¿Cuál sería la invitación a la comunidad en torno a María?
No podemos ser cristianos si no somos marianos, porque ella fue quien permitió a Dios realizar su proyecto, ella fue la primera que ha tenido dentro de sí misma durante nueve meses al el hijo de Dios, por eso, cada vez que nosotros celebramos la Eucaristía llegamos a ser como ella y por eso tenemos como ella, tener esta intimidad con Jesús, nosotros tenemos que imitarla, en esta intimidad, para conocer el verdadero Dios.