Por Juan Pablo Vázquez Rodríguez
Monterrey, N.L. (www.pastoralsiglo21.org).- 22 de enero 2020. El próximo 26 de enero se celebrará por primera vez el domingo de la Palabra de Dios, una iniciativa que el Papa Francisco confía a toda la Iglesia para que «la comunidad cristiana se centre en el gran valor que la Palabra de Dios ocupa en su existencia cotidiana» y que instituyó el pasado 30 de septiembre de 2019 con la Carta Apostólica Aperuit illis.
El Santo Padre ha convocado a que en todas las parroquias se haga realce de esta celebración:
“En cualquier caso, será importante que en la celebración eucarística se entronice el texto sagrado, a fin de hacer evidente a la asamblea el valor normativo que tiene la Palabra de Dios. En este domingo, de manera especial, será útil destacar su proclamación y adaptar la homilía para poner de relieve el servicio que se hace a la Palabra del Señor”. (Aperuit illis #3).
A los sacerdotes ha realizado de manera especial un llamado:
“En este domingo, de manera especial, será útil destacar su proclamación y adaptar la homilía para poner de relieve el servicio que se hace a la Palabra del Señor”.
“Por lo tanto, es necesario dedicar el tiempo apropiado para la preparación de la homilía. No se puede improvisar el comentario de las lecturas sagradas. A los predicadores se nos pide más bien el esfuerzo de no alargarnos desmedidamente con homilías pedantes o temas extraños. Cuando uno se detiene a meditar y rezar sobre el texto sagrado, entonces se puede hablar con el corazón para alcanzar los corazones de las personas que escuchan, expresando lo esencial con vistas a que se comprenda y dé fruto”. ((Aperuit illis #5).
“Que el domingo dedicado a la Palabra haga crecer en el pueblo de Dios la familiaridad religiosa y asidua con la Sagrada Escritura, como el autor sagrado lo enseñaba ya en tiempos antiguos: esta Palabra «está muy cerca de ti: en tu corazón y en tu boca, para que la cumplas» (Dt 30,14).