Ciudad del Vaticano (www.pastoralsiglo21.org) 23 de Mayo del 2018.- En los días que siguen a la Solemnidad de Pentecostés, el Papa Francisco reflexionó, en la catequesis que impartió durante la Audiencia General, sobre el testimonio que el Espíritu suscita en los bautizados, centrándose en el sacramento de la Confirmación.
El Santo Padre partió de la gran misión que Jesús confió a sus discípulos, a saber, “ser la sal de la tierra y la luz del mundo”. Se trata de dos imágenes que según el Papa, “hacen pensar a nuestro comportamiento”, porque “tanto la carencia, como el exceso de sal, hacen disgustoso el alimento”, y también “la falta o el exceso de luz, impiden ver”:
“Quien puede verdaderamente hacernos sal que da sabor y preserva de la corrupción, y luz que ilumina el mundo, -aseguró el Pontífice- es sólo el Espíritu de Cristo”.
Para finalizar el Santo Padre invitó a que “con el recuerdo todavía reciente de la pasada fiesta de Pentecostés pidamos a la Virgen María que nos ayude a ser dóciles al Espíritu Santo, para que sepamos dar a nuestro alrededor un testimonio vivo de santidad y amor, entregándonos en todo momento al bien de los demás”, e impartió su bendición.
Con información de: Vatican News.