Por Juan Pablo Rodríguez Vázquez
Monterrey, N.L. (www.pastoralsiglo21.org).- 29 de octubre 2020
El ataque con arma blanca tuvo lugar esta mañana, alrededor de las 9, en la Basílica de Notre-Dame en el centro de Niza, en la Avenida Jean-Medecin. El agresor, que gritó “Alá Akbar”, decapitó a una mujer y degolló a un hombre -el sacristán- que murió instantáneamente dentro de la iglesia y atacó a otra mujer, que huyó y se refugió en un bar, donde murió poco después, tras haber sido gravemente herida. Tuvo tiempo para decir: “Dile a mis hijos que los amo”. Los oficiales entraron, disparando. El agresor fue arrestado después de haber sido herido.
El alcalde de Niza, Cristian Estrosi, que inmediatamente habló de un ataque terrorista, ordenó que todas las iglesias fueran vigiladas o cerradas, así como todos los demás lugares de culto de la ciudad. El mismo alcalde informó entonces que “mientras se medicaba al agresor, continuó gritando ‘Alá es grande’.
EL PAPA REZA POR LAS VICTIMAS
Informado del cruel atentado terrorista que tuvo lugar en la Basílica de Notre-Dame en la ciudad francesa, que provocó la muerte de tres personas, el Papa Francisco – informa la Oficina de Prensa de la Santa Sede – está cerca de las familias de los asesinados y del país: “Que cese la violencia” y “que el querido pueblo francés pueda reaccionar unido al mal con el bien”. Los obispos franceses también expresan su dolor: a las 15 campanas sonarán a muerto en toda Francia.
Asimismo, el Sumo Pontífice condena los “tan violentos actos de terror de la manera más enérgica posible”, y “asegura a la Comunidad Católica de Francia y a todo el pueblo francés su cercanía, y los llama a la unidad”. Finalmente, “encomendando Francia a la protección de Nuestra Señora, imparte de todo corazón la Bendición Apostólica a todos los afectados por esta tragedia”.