En una celebración llena de significado espiritual, la Arquidiócesis de Monterrey se prepara para dar inicio al Año Jubilar el próximo 29 de diciembre, en consonancia con la apertura de la Puerta Santa en la Basílica de San Pedro por parte del Papa Francisco el 24 de diciembre. Este tiempo especial, que se prolongará hasta el 28 de diciembre de 2025, busca renovar la fe de los creyentes, fortalecer la esperanza y promover la práctica activa de la misericordia entre las comunidades.
El Año Jubilar, decretado por Su Santidad, tiene como propósito central que los fieles experimenten el amor de Dios y encuentren en Él la esperanza de salvación. En palabras del Papa Francisco, “la esperanza no defrauda” (Spes non confundit, 6), un mensaje que resonará a lo largo de este periodo especial en las Iglesias de todo el mundo.
𝐈𝐧𝐢𝐜𝐢𝐨 𝐝𝐞𝐥 𝐀𝐧̃𝐨 𝐉𝐮𝐛𝐢𝐥𝐚𝐫 𝐞𝐧 𝐌𝐨𝐧𝐭𝐞𝐫𝐫𝐞𝐲
El Arzobispo de Monterrey, Mons. Rogelio Cabrera López, ha convocado a los fieles de la arquidiócesis a participar en la apertura solemne del Año Jubilar, que tendrá lugar el domingo 29 de diciembre. La jornada comenzará con un peregrinaje desde el Santuario Sacerdotal Diocesano del Sagrado Corazón de Jesús hacia la Catedral Metropolitana, culminando con la celebración de la Santa Misa a las 12:00 p.m.
Este peregrinaje, considerado uno de los actos centrales del jubileo, simboliza el camino de esperanza iluminado por la Palabra de Dios, uniendo a los creyentes en un testimonio común de fe.
𝐈𝐧𝐝𝐮𝐥𝐠𝐞𝐧𝐜𝐢𝐚𝐬 𝐲 𝐩𝐫𝐚́𝐜𝐭𝐢𝐜𝐚𝐬 𝐣𝐮𝐛𝐢𝐥𝐚𝐫𝐞𝐬
Durante el Año Jubilar, los fieles tendrán la oportunidad de obtener indulgencias plenarias, un don espiritual que simboliza la reconciliación con Dios y la comunidad. Estas indulgencias podrán obtenerse participando en actos litúrgicos como la Santa Misa, el rezo del Santo Rosario, el Vía Crucis o celebraciones penitenciales, tanto en la Catedral Metropolitana como en las tres basílicas y santuarios marianos de la arquidiócesis.
Además, el Papa Francisco ha dispuesto que las indulgencias puedan ganarse también mediante la participación en misiones populares, ejercicios espirituales y encuentros de formación basados en los textos del Concilio Vaticano II y el Catecismo de la Iglesia. Las obras de misericordia, tanto corporales como espirituales, tendrán un papel fundamental durante este jubileo.
Entre estas obras destacan actos como dar de comer al hambriento, visitar a los enfermos, consolar al triste y perdonar las ofensas, así como el acompañamiento a personas en situaciones de vulnerabilidad, como ancianos, presos y personas con capacidades diferentes.
Mons. Cabrera López ha subrayado la importancia de estas acciones, recordando que “al visitar a nuestros hermanos necesitados, encontramos a Cristo presente en ellos”.
𝐀𝐜𝐜𝐞𝐬𝐨 𝐚𝐥 𝐣𝐮𝐛𝐢𝐥𝐞𝐨 𝐩𝐚𝐫𝐚 𝐭𝐨𝐝𝐨𝐬
Consciente de que no todos los fieles podrán participar físicamente en los peregrinajes o visitas a los lugares sagrados, la Iglesia ha extendido las gracias jubilares a aquellos que, por motivos de salud, edad avanzada o situaciones especiales, no puedan desplazarse. Estas personas podrán unirse espiritualmente mediante la recitación del Padre Nuestro, la Profesión de Fe y otras oraciones desde sus hogares, ofreciendo sus sufrimientos y dificultades como signo de comunión con la Iglesia.
𝐔𝐧 𝐥𝐥𝐚𝐦𝐚𝐝𝐨 𝐚 𝐥𝐚 𝐞𝐬𝐩𝐞𝐫𝐚𝐧𝐳𝐚 𝐲 𝐥𝐚 𝐫𝐞𝐜𝐨𝐧𝐬𝐭𝐫𝐮𝐜𝐜𝐢𝐨́𝐧 𝐬𝐨𝐜𝐢𝐚𝐥
El Año Jubilar también es una invitación a trabajar por la reconciliación y la reconstrucción del tejido social. Mons. Cabrera López instó a los fieles a ser “signos tangibles de esperanza” para quienes enfrentan condiciones de pobreza o sufrimiento, practicando sin cesar las obras de misericordia y fomentando una cultura de solidaridad y caridad.
El jubileo concluirá en Monterrey el 28 de diciembre de 2025, mientras que a nivel universal será clausurado en la Solemnidad de la Epifanía del Señor el 6 de enero de 2026. Este periodo será, sin duda, un tiempo de gracia para renovar el compromiso cristiano y llevar la luz de la esperanza al mundo.
𝐀𝐠𝐞𝐧𝐝𝐚 𝐝𝐞 𝐚𝐩𝐞𝐫𝐭𝐮𝐫𝐚:
-Fecha: Domingo, 29 de diciembre de 2024
-Hora: 12:00 p.m.
– Lugar: Peregrinaje del Santuario del Sagrado Corazón de Jesús a la Catedral Metropolitana de Monterrey
-Actividades: Peregrinaje y celebración solemne de la Santa Misa
La Arquidiócesis invita a todos los fieles a participar y vivir este tiempo como una oportunidad única para profundizar en la fe, la esperanza y el amor.