Personal de la Arquidiócesis de Monterrey, realizó la tradicional peregrinación anual, para visitar a nuestra Madre Santísima de Guadalupe.
Este encuentro con nuestra Madre Santísima, además de ser una oportunidad de dar gracias por todas las bendiciones y encomendar las intenciones personales y comunitarias, fue un tiempo propicio para la convivencia y la reflexión del personal de la Arquidiócesis integrado por departamentos, pastorales y la curia.
Antes de partir a la peregrinación, el padre David Jasso y el Padre Francisco Gómez, compartieron un tema sobre el documento final del Sínodo de la Sinodalidad.
La peregrinación partió del templo de San Felipe a la Basílica de Guadalupe, al llegar al Santo Recinto, se llevó a cabo la celebración eucarística, presidida por el Arzobispo de Monterrey.
“Como servidores de la Evangelización de toda la Diócesis, con paciencia, alegría y esperanza. Así preparamos, juntos, la venida del Señor Jesús”, invitó Monseñor Cabrera López.
Finalmente, el personal de la curia tuvo un espacio de convivencia posterior a la celebración, en el sótano de la Basílica.