Todos los obispos del país se reúnen para la CXVII Asamblea Plenaria de la Conferencia del Episcopado Mexicano, en ella se reflexionará sobre el camino sinodal recorrido durante el trienio 2021-2024, evaluar los frutos alcanzados y proyectar con esperanza y decisión el futuro de nuestra misión pastoral.
Monseñor Rogelio Cabrera agradeció a todos, especialmente a los hermanos obispos por los 6 años que estuvo en el servicio como Presidente de la CEM.
En su mensaje de apertura señaló: “Me disculpo por las fallas cometidas en este tiempo haciendo mío el deseo que el Papa Francisco transmitió a los jóvenes en el año 2022, y que imploro de Dios Nuestro Señor para nosotros: pidamos alas y raíces”.
“Alas para volar, soñar y crear, para imaginar y construir un México diferente, en el que la Iglesia sea la sal que da sabor y protege, y también solicitemos raíces para absorber de nuestro pueblo la ancestral sabiduría-savia que posee, para ser fieles a nuestra historia, construyendo nuevas etapas de la misma”, añadió.
También, Cabrera López ha invitado a todos los obispos de México a ser discípulos y dar sentido y sabor a la vida cristiana de quienes nos rodean.
“Hemos de ser voz de los sin voz, no mensajeros de los que tienen todo”
Unamos nuestras oraciones para que el Espíritu Santo guíe a nuestros obispos en este momento decisivo para la Iglesia en México.
#PastoralSigloXXI